lunes, 7 de septiembre de 2015

           EN UN DESCUIDO

Decido callarme,  mi voz no te alcanza
Decido ser  mía , no ser nunca de nadie
Decido subir al viento y conducir su brebaje
Decido no dejar que nunca nadie más me dañe.

Porque en un pequeño descuido todo cambia
Porque es un instante  clama el dolor
Porque llega a la llaga el frío y el calor
Porque todo escapa menos tú
Porque llega y no marcha

Y en el marco de un roto espejo
Ríes sin ganas, sonrisa de duelo
Y cantas sin voz a la  luna y al sol
Mientras  lamen tus heridas
Tu ya solo puedes  decirles adios.